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El 13 de Febrero comenzamos la 3º edición del programa formativo del equipo de mentores del Colegio de Ingenieros Industriales de la Comunidad Valenciana (COIIV). Durante 2 meses los participantes, ingenieros industriales de amplia experiencia y trayectoria pertenecientes al COIIV, serán acompañados en su formación y aprendizaje por nuestra mentora profesional acreditada Ana Sanjuan para conocer las claves del mentoring, la estructura de un proceso y una sesión de mentoring, las 7 dimensiones del rol de mentor y las habilidades asociadas a cada una de ellas para construir una relación de mentoring que sea una fuente de aprendizaje y desarrollo para sus mentees.

El COIIV pone en marcha la 2º Edición del Programa de Mentoring para el desarrollo profesional de sus colegiados y como paso previo al inicio del mismo la Escuela de Mentoring se encargará de formar al nuevo equipo de mentores y mentoras que participa en esta nueva edición. La formación se desarrollará íntegramente en el formato online y virtual, siguiendo el esquema de nuestro curso de iniciación al mentoring, adaptado a las necesidades del COIIV.

El curso tiene una duración total de 30 horas a desarrollar en 2 meses, contando con diferentes contenidos y actividades: contenidos scorm y pdf, cuestionarios de autoevaluación, actividades prácticas con feedback personalizado, tutorías vía chat, recursos en vídeo, artículos y herramientas, foro de debate y dos sesiones virtuales de mentoring grupal siguiendo la metodología Integral Generative Mentoring, propiedad de la Escuela de Mentoring.

El curso cuenta con 5 módulos de contenidos, que a continuación detallamos, dentro de los cuales se incluyen diferentes actividades prácticas, herramientas y recursos:

MODULO I: ¿Qué es el mentoring?

– Definición de mentoring
– Palabras claves en el mentoring: aprendizaje, experiencia, orientación..
– Que no es mentoring
– Beneficios del mentoring

MODULO II: La relación de mentoring

– Bases de la relación de mentoring
– Factores de éxito y fracaso
– Aportaciones del mentor y del mentee

MODULO III: El rol del mentor y sus 7 dimensiones y habilidades básicas.

MODULO IV: Un recorrido por el proceso de mentoring, diferentes fases y actividades.

MODULO V: Un esquema para las sesiones de mentoring

Tras la finalización del curso los participantes estarán en condiciones de comenzar sus procesos de mentoring con los mentees asignados por el COIIV. La experiencia en la anterior edición ha sido excelente, te invitamos a conocer los resultados en este video en el que sus protagonistas nos cuenta como ha sido su participación en el programa.

 

Estamos encantados de poder acompañar a de nuevo al  grupo de nuevos mentores y seguir contribuyendo a la implantación del mentoring en diferentes ámbitos y organizaciones.

Lograr la excelencia organizacional implica responder de una forma efectiva y equilibrada a dos necesidades contrapuestas que conforman la dinámica empresarial actual: por una parte, mantener lo esencial y lo que funciona, y por otra, responder con agilidad a los cambios y demandas del entorno. Hoy en día este equilibrio implica la supervivencia para muchas organizaciones, dado el alto nivel de complejidad, incertidumbre y rapidez de los cambios existentes.

Para lograr la excelencia organizacional es necesario explorar las fortalezas de la organización, descubrir su potencial, y aprovecharlo para convertirlo en una ventaja competitiva. A nadie se le escapa, que lo anterior pasa por descubrir y multiplicar el potencial de las personas que conforman las organizaciones, lograr conectar dicho potencial con el trabajo que desempeñan y que las personas se comprometan con la visión y misión de la organización.

El desarrollo del talento y el compromiso son actitudes que no puede ser dirigidas, ni controladas, ni gestionadas porque depende de la voluntariedad de las personas. Nos pueden obligar a trabajar más horas, a realizar unos trabajos u otros, a hacerlos de una determinada manera, pero nunca podrán obligarnos a comprometernos con una misión, ni a dar lo mejor de nuestro talento.  Esto ultimo solo se consigue a través de la inspiración, la confianza, la creación de sentido y significado y la influencia, lo que requiere adoptar una perspectiva humanista de la persona y su desarrollo.

Desde dicha perspectiva surgen conceptos como el ENGAGEMENT, definido por William A. Khan como una fuerte conexión física, psicológica y emocional que experimenta una persona con el ejercicio de su rol, que le llevan a tener unas altas dosis de energía que se traducen en un mayor rendimiento y mejores resultados.

Un trabajador engaged se caracteriza por:

– Altos niveles de energía y resistencia mental que le hacen esforzarse a pesar de las dificultades

– Altos niveles de implicación con su trabajo, el cual es percibido como algo estimulante, retador, inspirador, gratificante y divertido.

– Altos niveles de concentración y conexión con la tarea que se está realizando, lo que Mihaly Csikszentmihalyi llama «estado de flujo»

¿Te imaginas lo que puede conseguir una organización en la que todos sus empleados estén engaged?  Los diversos estudios e investigaciones, realizados en los últimos 10 años, sobre el engagement señalan que tiene una correlación directa con niveles altos de desempeño laboral, con bajos niveles de rotación de personal, mejores niveles de productividad y rentabilidad y mayores tasas de crecimiento.

Por si todo esto fuera poco, el engagement, como aglutinador de emociones positivas, tiene capacidad de contagio dentro y fuera de la organización. Bárbara  Fredrickson defiende la teoría del contagio emocional en las organizaciones, atribuyéndole, cuando hablamos de emociones positivas como el engagement,  diversos efectos como la ampliación del foco de atención, la apertura a los demás y al entorno, la ampliación del pensamiento y la creatividad, entre otros. Los procesos de apertura, que propician las emociones positivas, permiten ampliar la percepción y generar nuevas ideas, que es la base de la innovacion, así como desarrollar la empatía, que es la base de la cooperación.

Además, y siguiendo a Fredrickson, la experimentación de emociones positivas, que produce el engagement, favorece y facilita la adquisición y desarrollo de nuevas habilidades, que son la base para el desarrollo del talento, así como para contar con personas polivalentes y capaces de adaptarse constantemente a los cambios que demanda el entorno.

Mantener los niveles  de engagement en una organización es tarea de todos y especialmente de la Direccion, para ello es necesario diseñar y construir organizaciones en las que sea promueva y favorezca:

– el flujo abierto de información y conocimiento

– el aumento de la autonomía del empleado

– la libertad para crear y explorar

–  las prácticas y relaciones de apoyo y el  feedback

– un estilo de comunicacion positivo y apreciativo, basada en el refuerzo, la persuasión social, el estimulo y el reconocimiento.

Segun Fredrickson, la comunicacion positiva y las experiencias de apoyo entre los miembros de un grupo constituyen un elemento diferenciador de los equipos de trabajo más productivos.

Engagement

Edward E. Lawler propone un diseño y desarrollo organizacional basado en el establecimiento de acciones, políticas y programas que permitan el cumplimiento de la FORMULA DEL ENGAGEMENT = INFORMACION + CONOCIMIENTO + EMPOWERMENT + RECONOCIMIENTO

En base a todo lo anterior podemos concluir, por una parte, que el diseño y desarrollo organizacional, así como las condiciones laborales, impacta de forma muy significativa en las actitudes hacia el trabajo y por tanto en los resultados. Y por otra parte,  que el engagement favorece altos niveles de desemepeño laboral y compromiso organizacional. Por tanto, parece necesario orientar el desarrollo organizacional hacia el logro del engagement, máxime si se tiene en cuenta que tanto los informes de diversas entidades como Gallup y las noticias sobre el fenómeno de la «Gran Renuncia» evidencia una disminución continuada del compromiso de las personas con sus trabajos y organizaciones.

Un desarrollo organizacional orientado a lograr el engagement requiere de la  incorporación de  las las siguientes practicas:

– Gestion emocional y apreciativa

– Empowerment individual y de equipos

Dirección por valores

Construcción de relaciones de confianza

– Diseño de tareas y actividades retadoras y conectadas con el propósito individual y organizativo

– Programas de Mentoring que fomentan el conocimiento compartido, la práctica del reconocimiento, el feedback y apoyo y un sentimiento de pertenencia

– Medidas de conciliación  de la vida personal y laboral.

Han pasado más de 60 años desde que Peter Drucker estableció como prioridad para el buen  funcionamiento empresarial, la capacidad de desarrollar un estilo de gestión que generase la participación activa y el compromiso de los empleados en una organización. Según los estudios, a día de hoy parece que no se ha conseguido y mi pregunta es ¿a qué estamos esperando para gestionar organizaciones desde el engagement?

 

Autora: Maria Luisa de Miguel

Directora de la Escuela de Mentoring

El portal Infolibros.com, cuya misión es poner a tu alcance los mejores libros para fomentar la lectura y el autoaprendizaje, ha incluido en su catálogo de libros recomendados,  el ultimo libro de nuestra Directora Ejecutiva, Mª Luisa de Miguel, «La Alquimia de la Motivación: cómo motivar la voluntad para vivir conectado a tu propósito» Ediciones Pirámide 2022.

 

La complejidad de nuestra sociedad actual requiere, cada vez más, una voluntad fuertemente motivada en un propósito que sea capaz de ejercer el autocontrol para resistirnos a una vida de inconsciencia e impulsos descontrolados. El estrés, el cansancio, la falta de sueño, las múltiples distracciones y el cambio constante debilitan nuestra voluntad y nos impiden ejercer nuestra libertad para realizarnos y ser felices. En cada uno de nosotros habitan dos versiones de ser humano: el yo controlado que actúa con impulsividad y busca la gratificación inmediata y el yo que controla que domina sus impulsos y sabe postergar la gratificación para proteger sus aspiraciones a largo plazo y el cumplimiento de su propósito. De nosotros depende cuál queremos cultivar y de esa decisión depende nuestra felicidad.

Debemos poner en jaque nuestro pensamiento y nuestro comportamiento y reflexionar acerca de cómo estamos abordando el tema de la motivación, porque su exceso y mal uso nos está volviendo personas adictas a ella y a todos los incentivos que se utilizan para activarla. La ciencia de la motivación no puede estar al servicio de mejorar la productividad y el rendimiento, porque el ser humano no es una máquina a la que se pueda programar, cambiar las piezas, amortizar y desechar por el cumplimiento de su vida útil. Somos seres sociales que existimos para la realización personal, la felicidad y la convivencia en sociedad. Ese debe ser el norte de cualquier conocimiento, incluido el nacido en torno a la motivación. Este libro es una invitación a reflexionar sobre cómo estamos viviendo, cómo estamos ejerciendo el control sobre nuestras vidas y qué influencia tiene en ello una hipermotivación extrínseca excesiva en detrimento de una voluntad más fuerte y reflexiva.

Tomarnos tiempo para parar, reflexionar y decidir con conocimiento de causa, con propósito, es ganar tiempo para vivir más felices.

 

La motivación es un fenómeno que despierta gran interés y preocupación en personas y organizaciones, en este libro puedes descubrir los perjuicios de no gestionarla adecuadamente, así como los beneficios de convertirte en un alquimista motivacional.

El libro está disponible a la venta en Amazon ;  Ediciones Pirámide; El Corte InglesCasa del Libro; FNAC y todostuslibros.com

El pasado 23 de Junio se llevó a cabo la primera presentación del libro, organizada por EMCC SPAIN, en la que acompañaron a la autora, Beatriz Valderrama, Doctora en Psicología y Presidenta de EMCC SPAIN y Vanessa Leal Lugo, Ejecutiva Primera de Capital Humano en el Banco de Desarrollo de América Latina. Puedes leer un resumen de la misma en la Edición de Noviembre-Diciembre de la Revista Observatorio Recursos Humanos, que publica un artículo sobre «Conversaciones en torno a la Alquimia de la Motivación», que puedes encontrar en este enlace.

 

Dentro de la sección que la Escuela de Mentoring tiene en la Revista ORH, en el mes de Diciembre, nuestra Directora Ejecutiva, Mª Luisa de Miguel publica un artículo sobre  bajo el título «Conversaciones entorno a La Alquimia de la Motivación».

 

El propósito es el motor principal de nuestras vidas, es el leitmotiv para nuestra motivación, esa acción que, impulsada por nuestra voluntad, nos hace actuar y conseguir nuestros sueños y alcanzar la felicidad, y dejar de ser un “yo controlado” por un “yo que controla”. Pero para lograrlo, los seres humanos necesitamos trabajar profundamente el autoconocimiento, aprender a gestionar nuestras habilidades y emociones y tener recursos y herramientas para afrontarlo. A través de una charla entre tres expertas en psicología, motivación y gestión de personas, María Luisa de Miguel, Beatriz Valderrama y Vanessa Leal, aportan una serie de útiles consejos sobre la alquimia motivacional y los procesos de mejora y aprendizaje que nos lleven a una vida completa y alineada con nuestro propósito.

 

Este artículo surge a raíz de la presentación del Libro «La Alquimia de la Motivación: cómo motivar la voluntad para vivir conectado a tu propósito», de nuestra Directora Mª Luisa de Miguel, organizada por EMCC Spain.  Durante la misma, Mª Luisa de Miguel mantuvo una interesante conversación con Beatriz Valderrama, Doctora en Psicología y Presidenta de EMCC Spain, y Vanessa Leal Lugo, Ejecutiva Principal Capital Humano en el Banco de Desarrollo para América Latina, en torno al libro.

En ella hablaron sobre el propósito como motor principal de nuestra motivación, de la relación entre voluntad, propósito, motivación y felicidad y de la necesidad de entrenar y fortalecer una voluntad bien motivada para dejar de ser un “yo controlado” y comenzar a ser un “yo que controla”. También de la importancia del autoconocimiento, la autorregulación motivacional y la práctica reflexiva para pasar de “buscadores” a “productores» de felicidad  y disfrutar de una vida significativa.

Si quieres leer el artículo completo puedes consultarlo en el número publicado en el nº 182 de la Revista ORH Diciembre 2022.  Te invitamos a suscribirte a la misma a través de este enlace y disfrutar de una amplia gama de contenido experto para la gestión del talento.

 

Si quieres conocer más sobre «La Alquimia de la Motivación», te invitamos a leer el libro de María Luisa de Miguel que puedes adquirir en diversos portales de compra online y librerías. 

A través de su páginas descubrirás cómo trabajar la voluntad, en conexión con tu perfil motivacional, te ayudará a ser más efectivo en el logro de tus metas y experimentar una vida más plena y significativa. En él encontrarás las claves para sacar el máximo partido a tus funciones ejecutivas, que son las que nos permiten ser un «yo que controla», en lugar de ser un «yo controlado» por los mercados.

Desde el 2021 Gold Fields está implicada en el Programa «Protagonistas mineras»,  dirigido a profesionales recién egresadas de carreras ligadas a la minería. Su objetivo es contribuir a la formación y crecimiento de profesionales bajo los estándares de Gold Fields, así como facilitar la formación profesional de mujeres que buscan aprender, mejorar sus conocimientos, desarrollar habilidades y competencias de liderazgo para abrirse camino en este sector.

Esta iniciativa se enmarca dentro del compromiso de Gold Fields de acortar las brechas laborales que limitan el crecimiento profesional de las mujeres que trabajan en la minería peruana. El enfoque de “Protagonistas Mineras” contribuye a la consolidación de la formación técnica y el desarrollo de habilidades de liderazgo, a través de la co-creación de proyectos innovadores. Como resultado de la misma, 18 de las participantes en la primera promoción ya están desempeñando funciones de su especialidad en áreas administrativas y operativas de la organización.

A finales 2022 se lanzó la 2º Promoción de «Protagonistas Mineras» entre  bachilleras o egresadas universitarias  de todas las universidades del Perú.

Las 21 participantes en esta 2º Promoción  realizarán sus prácticas durante 1 año en la operación minera. Para ello, cada una tendrá asignada un mentor o mentora que las acompañará, guiará y orientará en esta etapa de su camino profesional, con el objetivo de impulsar su desarrollo en el sector minero, contribuyendo a cerrar las brechas de género que existen aún en el sector.

La Escuela de Mentoring va a realizar la formación presencial de los mentores y mentoras participantes en el programa, durante Febrero 2023 en Cajamarca, una de las áreas de las operaciones mineras de Gold Fields en Perú. Seguimos de esta forma aportando valor en el sector de la minería a través del mentoring como práctica que mejora la gestión de la diversidad e inclusión de las mujeres en sectores en las que están infrarrepresentadas.

La Asociación Española de Ejecutiv@s y Consejer@s (EJE&CON) se hizo eco a través de su perfil en Linkedin de la publicación del libro de nuestra Directora, Mª Luisa de Miguel: «La Alquimia de la Motivación: cómo motivar la voluntad para vivir conectado a tu propósito». Ediciones Pirámide 2022.

 

Nuestra socia Maria Luisa de Miguel Corrales ha escrito varios libros en los últimos años. ‘La Alquimia de la Motivación: cómo motivar la voluntad para vivir conectado a tu propósito’ (Pirámide, 2022) nos invita a reflexionar sobre cómo estamos viviendo, cómo estamos ejerciendo el control sobre nuestras vidas y qué influencia tiene en ello una hipermotivación extrínseca excesiva en detrimento de una voluntad más fuerte y reflexiva.

En su libro ‘Mentoring, un modelo de aprendizaje para la excelencia personal y organizacional’ (Pirámide, 2019), la autora nos habla del mentoring y nos presenta la ruta para navegar en la era del aprendizaje, descubriendo un modelo para construir relaciones y mantener conversaciones transformadoras.

¡Enhorabuena! 👏 Para nosotros es un placer contar con profesionales tan cualificados como María Luisa.

 

La Directora de la Escuela de Mentoring, María Luisa de Miguel, pertenece desde hace años a EJE&CON y es miembro del Foro de Recursos Humanos de dicha entidad. Muy agradecidos a EJE&CON por recomendar su ultimo libro y difundir su labor como escritora.

Si quieres conocer más sobre «La Alquimia de la Motivación», te invitamos a leer el libro de María Luisa de Miguel que puedes adquirir en diversos portales de compra online y librerías. 

A través de su páginas descubrirás cómo trabajar la voluntad, en conexión con tu perfil motivacional, te ayudará a ser más efectivo en el logro de tus metas y experimentar una vida más plena y significativa. En él encontrarás las claves para sacar el máximo partido a tus funciones ejecutivas, que son las que nos permiten ser un «yo que controla», en lugar de ser un «yo controlado» por los mercados.

La Revista Capital Humano, en su edición de Enero 2023, publica una entrevista a nuestra Directora Ejecutiva, Mª Luisa de Miguel, sobre su último libro «La Alquimia de la Motivación: cómo motivar la voluntad para vivir conectado a tu propósito» Ediciones Pirámide 2022.

En ella, su Editora Jefe, Mercedes de la Rosa Valverde, conversa con Mª Luisa acerca de algunas de las ideas contenidas en el libro: dónde reside realmente nuestra motivación y que relación tiene con la felicidad, qué cambios nos ha traído la crisis sanitaria COVID-19 a nivel motivacional, cómo afecta a nuestra motivación la vorágine de cambios a los que estamos sometidos día a día, que consecuencias tiene para nuestra vida un hipermotivación extrínseca constante, cómo está enfocando el mundo de la empresa el tema de la motivación, ¿realmente podemos hablar del líder motivador?

El cambio constante nos genera incertidumbre, nos hace tener que estar continuamente aprendiendo y desaprendiendo, todo lo cual nos hace sentirnos inseguros. Como esta sensación nos desagrada la queremos evitar a toda costa. La forma de hacerlo es experimentando el placer de la gratificación instantánea, por eso nos hemos vuelto impacientes ante la presencia de cualquier malestar y, en paralelo, impulsados a eliminarlo y enganchados a todo aquello que lo sofoque.

El sistema económico se nutre de ello y ha sabido crear el engranaje perfecto para seguir engordando: produce cambios de manera continua y luego para calmar nuestra ansiedad nos suministra el deleite instantáneo creando una demanda de bienes y servicios que la gente no necesita y que solo busca satisfacer anhelos artificiales. Todo ello ha contribuido a lo que muchos llaman «la generación de ya», acostumbrada a tenerlo todo a golpe de click, ha desarrollado una intolerancia a la demora de la gratificación y una forma de vida impulsiva. Este hacer constante, irreflexivo, impulsivo e inconsciente nos agota y eso desgasta nuestra energía, que está muy relacionada con la motivación. Además, el hacer irreflexivo e impulsivo es un hacer sin sentido, sin motivo, lo que también acaba desmotivándonos y debilitando nuestra fuerza de voluntad.

Si quieres disfrutar de la entrevista completa puedes verla en este enlace a la Revista Capital Humano.

 

 

 

Y para seguir profundizando sobre la motivación te recomendamos la lectura del libro «La Alquimia de la Motivación: cómo motivar la voluntad para vivir conectado a tu propósito». 

Ser mentor es un camino de largo recorrido en el que deben estar muy alineados el ser, el saber y el hacer, porque no se trata solo ponerse delante de una persona y darle consejos acerca de lo que tiene que hacer o no hacer para lograr lo que quiere. Es mucho más, ser mentor es adquirir un compromiso con el desarrollo personal y profesional de otras personas.

El «ser» representa la esencia de un mentor, lo que le define, y no tiene nada que ver con su forma de hacer, con su experiencia, con su conocimiento, sino con su propósito, su compromiso, con los valores que ejemplifica al hacer mentoring, con su actitud ante las personas a las que guía. 

El «saber» es el conocimiento que nos permite comprender y acompañar con efectividad los procesos de aprendizaje, cambio y desarrollo de otros, pues sin él nuestras buenas intenciones y disposición a veces puede causar más mal que bien en las personas. 

El «hacer» son las habilidades que hay que desarrollar y poner en práctica para contribuir de la mejor forma posible al desarrollo de otros.

Los mentores somos caminantes, peregrinos que recorren un camino acompañando a otros a desarrollar todo su potencial para lograr sus metas y realizarse como personas, ya sea como emprendedores, como profesionales independientes, como directivos,  profesores, logrando su primer empleo, mejorando el que tienen, tomando una decisión importante en sus vidas, etc.

No todo el mundo ejerce como mentor por los mismos motivos y estos cambian mucho el tipo de mentor/a que somos. A lo largo 22 años de experiencia dedicada al mentoring he formando a más de 6000 mentores, en diferentes lugares del mundo y con diferentes perfiles, y he visto muchas y diversas motivaciones para ser mentores: dinero, prestigio, obligación, admiración, reconocimiento, marca personal, diferenciación, necesidad de demostrar cuanto se, cuán experto soy, necesidad de tener seguidores e imitadores, deseo de contribuir, interés por desarrollar a otros…

El camino de ser mentor se puede recorrer por diferentes motivaciones, pero solo hay una que marca la diferencia y que te lleva a ser un mentor/a excelente: un genuino interés por invertir en el desarrollo de otros para que puedan lograr sus metas y realizarse; disfrutar el éxito de otros como si fuera el propio, sin apropiarse de él, lo que llamo “Felicidad Indirecta”, la misma que experimenta un sherpa, pues su satisfacción no está en el número de veces que ha logrado personalmente llegar a la cumbre del Everest, sino en el número de veces que ha ayudado a otros a alcanzar la cima.

Por eso como buenos peregrinos no debemos perder nunca nuestro norte, nuestro santuario: acompañar a otros para que logren por sí mismos sus metas. No debemos perderlo o cambiarlo por el reconocimiento, el prestigio, la popularidad, la fama, el estatus, porque en el momento que lo hagamos, no solo dejaremos de ser mentores, sino que estaremos limitando el desarrollo de otros. 

Ser mentor y acompañar a nuestro mentee durante todo el proceso de mentoring es una experiencia de aprendizaje que te reta, te cambia y te transforma, porque aprenderás de tu mentee, sobre ti mismo, sobre las personas, sobre las relaciones y sobre la vida. 

El “ser”: la esencia de un mentor/a excelente

1.- CREYENTE: Un mentor es un creyente. Cree firmemente en que todas las personas tienen un potencial a desarrollar y una inclinación natural a hacerlo. Otra cosa distinta es que conozcan o no ese potencial, tengan más o menos, sepan como desplegarlo o que esa inclinación natural esté bloqueada o desentrenada. 

Creemos que las personas son lo suficientemente inteligentes para encontrar las respuestas por sí mismas, no necesitan que otro se las de. Creemos que el talento no brota siempre por sí solo, a veces hay que despertarlo, activarlo y ofrecerle las oportunidades adecuadas para desarrollarlo.

2.- SERVIDOR:  Un mentor excelente lo es por vocación, tenemos una inclinación natural a  acompañar a otros a superarse, a desarrollarse por sí mismos. Esto es lo que nos ayuda a no dirigir, a acompañar orientando, respetando la individualidad de aquellos a quienes acompañamos, sin imponer nuestros puntos de vista, nuestra manera de ver y hacer las cosas. Aceptamos de forma incondicional a nuestros mentees y nos adaptamos a ellos, a sus características personales, a su forma y ritmo de aprender, respetando sus decisiones y no tratando de influirlas o cambiarlas. Somos un instrumento al servicio de su desarrollo.

3.- APRENDIZ ETERNO: estamos siempre abiertos a la experiencia, por mucha que tengamos nos enfrentamos a cada actividad, a cada situación y al propio proceso de ser mentor con una mentalidad de principiante. No nos quedamos instalados en nuestra atalaya de conocimiento, sino que pisamos la arena para aprender de la experiencia de ser mentor, de nuestros mentees y  de cada sesión de mentoring. Acudimos a ellas como si fuera la primera, sin prejuicios, sin juicios, sin ideas preestablecidas, sin plan, sin herramientas o preguntas predeterminadas, abiertos a escuchar lo que el mentee trae en ese momento, lo que necesita para seguir avanzando y ayudarle desde ahí. 

Esto requiere saber lidiar con la incertidumbre, saber tolerar la frustración de no entender lo que le pasa al mentee y como ayudarle, de no encontrar la pregunta adecuada, de no saber si el mentee ha avanzado o no en su objetivo desde la anterior sesión, de no saber que me voy a encontrar, además de muchísima paciencia y flexibilidad.  

El mentoring no es una práctica estructurada, estandarizada y rígida, no es un proceso en el que en se sabe de antemano en cada sesión qué hacer y cómo, porque cada persona necesita cosas diferentes, tiene circunstancias y problemas distintos, ritmos y estilos de aprendizaje diversos y objetivos muy personales a lograr. Ser mentor te pone a prueba: muchas veces, no sabrás cómo hacer la pregunta más adecuada, cuándo intervenir y cuándo no, qué pasa entre las sesiones, cómo va a llegar el mentee a la siguiente sesión; otras, te encontrarás con mentees que les cuesta abrirse, que dudan mucho, que no saben que quieren, a los que te cuesta seguirles el hilo de la conversación y pondrán a prueba tu capacidad de adaptación, de pericia y de paciencia. 

4.- HERMANO: El mentoring es una relación de hermano a hermano, de ser humano a ser humano, sin jerarquías, sin relaciones asimétricas o de poder, sin «yo sé y tu no», o «yo sé más» (porque soy más mayor, tengo más experiencia, he tenido mucho éxito en la vida, o tengo 3 master en las mejores universidades del mundo). La humildad y la empatía son importantes características de un mentor, que se traducen en escuchar para conocer y comprender al mentee, sin juicios, respetando quién es, aunque no nos guste y no estemos de acuerdo con él. 

Cuando nos hermanamos las personas se abren y eso es lo que permite aflorar el talento para poder desarrollarlo. Desde la hermandad tu actitud es la de estar ante otro ser humano que es experto en sí mismo, que sabe lo que quiere y cómo conseguirlo, le podrá faltar información, podrá estar bloqueado, dudar, pero una vez que todo esto se despeje sabrá como lograr sus objetivos.  

5.- RESONANTE: la resonancia amplifica y prolonga el impacto de las palabras, las acciones, las sensaciones y los aprendizajes. Hace que tus actos (una pregunta, una palabra, una frase, una forma de hacer) se mantengan presentes, a pesar de la distancia, y sigan sirviendo como fuente de aprendizaje a tu mentee, porque le resuenan una y otra vez en su cabeza, como si estuvieran flotando en el aire y no se pudieran despegar de ellas. La resonancia propicia aprendizajes significativos, esos que nunca se olvidan y afloran en los momentos vitales y decisivos, convirtiéndolos en uno de sus mejores recursos para el cambio y el logro de metas.

Para resonar necesitamos tener una presencia plena y consciente en las sesiones de mentoring, estar solo centrados en nuestro mentee, sin diálogo interno, sin distracciones, sin interrupciones, escuchando con atención plena, actuando con autenticidad, honestidad y congruencia. Solo así evitaremos que nuestras emociones, creencias, juicios y prejuicios intoxiquen la relación, sesguen la visión que tenemos del mentee y condicionen la forma de guiarlo adecuadamente, según sus necesidades. Un mentor tiene que tener un alto grado de autoconocimiento y de consciencia interior y exterior, implica saber convivir y estar a gusto con el silencio, desconectarse de todo lo ajeno al rol de mentor antes de cada sesión y durante la misma. 

6.-INVERSOR: invertimos en el desarrollo de otros, en potenciar la inteligencia de las personas a las que acompañamos para que logren metas por sí mismos, no les hacemos el trabajo, no les decimos qué tienen que hacer o cómo hacerlo.  

La diferencia entre invertir o intervenir, para resolver o salvar, se traduce, en la mayor parte de los casos, en preguntar en lugar de opinar o responder, en escuchar más que en hablar. Lo contrario genera dependencia. Si rescatamos, solucionamos o respondemos por otros ¿qué pasará cuando no estemos ahí para hacerlo? ¿cómo resolverán o decidirán? ¿cómo aprenderán a encontrar sus propias respuestas, a crear su propia sabiduría?

Invertimos cuando ayudamos a reflexionar a nuestros mentees para que tomen decisiones, cuando no influimos en ellas, cuando no evitamos o impedimos que las tomen, cuando creemos que nos son son adecuadas o les van a generar problemas. Invertimos cuando estamos ahí para ayudarles a aprender de los errores cuando se equivocan, porque lo contrario lo privará de ese aprendizaje o le desposeerá de la propiedad de su éxito. De la misma forma que un entrenador de fútbol no salta al campo para tirar un penalti porque cree que su jugador lo va a fallar, los mentores no intervenimos en las decisiones de nuestros mentees, no resolvemos sus problemas. Nuestro rol y responsabilidad es entrenar, no jugar.

Todo ello se traduce en que más del 60% de la conversación en una sesión de mentoring debe ocuparla el mentee, las ideas, las decisiones , las acciones deben surgir del mentee. El mentor debe saber practicar una generosidad inteligente: no hacer, ni dar lo que el mentee puede hacer o conseguir por sí mismo; no hacer, ni dar más de lo que el mentee hace o aporta. 

Aunque tengamos la respuesta, no debemos darla. Si lo hacemos se pierde el momento didáctico, la oportunidad del aprendizaje significativo del mentee. Los mentores debemos ser socráticos: hacer la pregunta y dejar que surja la respuesta. Con la respuesta resolvemos, tiramos el penalti y marcamos el gol. Con la pregunta ayudamos a que el mentee aprenda a encontrar sus respuestas, a resolver sus problemas, a tirar penaltis y marcar goles. Nuestra función es pasar la pelota a quien tiene que marcar el gol. 

Un mentor es un inversor porque invierte en el autoconocimiento, autoconfianza, autoreflexión, automotivación, autofeedback de su mentee, activando sus recursos para que puedan producir resultados de forma independiente. Invertimos nuestra inteligencia en potenciar la del mentee, invertimos en su habilidad para resolver problemas y saber evitarlos en el futuro, para incrementar su capacidad de dirigir su propio aprendizaje, su desarrollo y su vida. 

7.- INSPIRADO E INSPIRADOR: un mentor es una fuente de inspiración porque despierta en su mentee las ganas de superarse, de experimentar, de probarse, de arriesgarse a apostar por lo que quiere y esto solo es posible a través del ejemplo, la coherencia y la credibilidad. 

Para inspirar a otros hay que estar inspirado. Una persona inspirada está conectada a sus fuentes de valor y energía: su propósito, sus valores, sus sueños, sus batallas personales para conseguirlos (con éxitos y fracasos), sus pasiones, sus emociones y su  legado. Cuando estamos inspirados contagiamos energía, resonamos y esto sirve de impulso al mentee para comprometerse con su meta. 

8.- LIBERTADOR: somos aceleradores de las carreras profesionales de otros porque les ayudamos a liberar todo su potencial, a desarrollarlo y usarlo para lograr sus metas. Lo hacemos creando un contexto de seguridad psicológica y reto, que facilita el pensamiento, estimula la creatividad, incentiva el atrevimiento intelectual y despierta la motivación Todo ello contribuye a un ciclo virtuoso de experimentación-reflexión, que que permite expresar ese potencial, ponerlo en acción, obtener resultados y convertir la experiencia en aprendizaje para seguir mejorando y creciendo.   

Brindamos ocasiones para poner en acción el talento diferencial de cada persona, conectándolo a las oportunidades que lo hacen posible y haciendo visibles sus logros y contribuciones. Ayudamos a eliminar los bloqueos (internos y externos) que les impiden desarrollarse: miedos, vergüenzas, dudas, creencias limitantes, falta de oportunidades, falta de información, de opciones, contextos inadecuados….. 

Un libertador del potencial deja espacio para pensar, expresar y hacer, para contribuir, reflexionar, parar y repensar, evitando la tendencia a ocupar la conversación con nuestras opiniones, ideas o sugerencias. Esto implica cambiar la proporción entre escuchar y hablar, para que otros puedan tener el espacio de compartir lo que saben, así como saber sostener los silencios para dejar pensar y atreverse a expresar. 

9.- ALQUIMISTA: un mentor sabe como ser un catalizador del cambio del mentee, ayudándole a transformar su negatividad en positividad, sus dudas en claridad, su inseguridad en confianza, su inacción en acción. Lo hace estimulando su pensamiento a través de una conversación reflexiva: primero escucha con atención para comprender que es lo que quiere exactamente el mentee y dónde está teniendo dificultades para lograrlo, reformula y enmarca el tema de la sesión y realiza preguntas provocadoras para guiar un proceso de toma de decisiones sólidas. Preguntas que obligan al mentee a pensar y repensar, a concretar, a aportar evidencias, cuestionar suposiciones, a mirar las cosas desde otro punto de vista, a ponernos en el lugar de otros. 

Ser un alquimista conversacional supone darse cuenta que nuestra mayor contribución es hacer preguntas que favorezcan un pensamiento de calidad. Que nuestra experiencia y conocimientos no solo sirven para transmitirlos, sino también para hacer buenas preguntas. 

El “saber” para acompañar con rigor y responsabilidad

Querer ayudar a otros a desarrollarse no significa poder hacerlo y hacerlo bien. A veces querer no es suficiente, el deseo de ayudar puede ser muy perjudicial si se ejecuta en forma inadecuada, por eso hay que saber como escuchar, como preguntar, como influye la manera de conversar en el desarrollo de las personas, saber dar feedback, aconsejar neutralmente o identificar cuando aportar ideas y cuando no. 

Antes de ponerte a ejercer como mentor, por mucho que te motive, pregúntate: ¿estoy suficientemente preparado? ¿mi experiencia es suficiente para acompañar a otros? ¿necesito cambiar algo en mi forma de relacionarme con las personas, en mi forma de conversar? ¿qué necesito saber para hacerlo bien? En líneas generales como funcionan los procesos de pensamiento, toma de decisiones, aprendizaje, cambio y desarrollo de las personas, cómo impactan las relaciones y conversaciones que mantenemos con ellos y como influyen los contextos, en los que interactúan, en todo lo anterior. En un plano más concreto, conviene tener siempre presente algunas claves:

-Que el pilar de cualquier proceso de aprendizaje, cambio y desarrollo es el autoconocimiento. Por eso los procesos de mentoring deben comenzar siempre por propiciarlo en el mentee a través de la indagación apreciativa y estratégica: Qué quiere, de dónde surge ese querer, que tiene y qué necesita para conseguirlo, dónde están sus mayores dificultades para lograrlo. Al hacerlo no sólo incrementareis su mayor recurso, sino que le estaremos conociendo y eso nos permitirá guiarlo mejor. 

-Que el desarrollo humano no es solo una cuestión intelectual, las emociones juegan un papel muy importante. Tenemos que saber ayudar al mentee a gestionarlas. Para cambiar el comportamiento primero hay que cambiar el pensamiento y antes la emoción. 

-Que las creencias tienen una influencia muy grande en nuestro comportamiento y nos pueden tanto limitar como potenciar. Hay que saber detectarlas y trabajarlas en favor del mentee y no se transforman con charlas motivacionales, masterclass, consejos e instrucciones, sino con preguntas, mucha escucha, paciencia, intuición y creatividad. 

-Que la idea “la gente no cambia porque no quiere” esforzarse, no está motivada, etc. es limitada y limitante. Las personas a veces no cambian porque no saben que tienen que cambiar (falta de consciencia), sienten que no pueden hacerlo (falta de autoeficacia) o no saben como hacerlo (falta de conocimiento, perspectiva, ideas, opciones) o no encuentran un motivo suficientemente importante para ello, un motivo que compense el esfuerzo, el tiempo y la pérdida del cambio. Cada una de estas causas del no cambio se trabaja de forma diferente. 

-Motivación no es igual a compromiso: las personas quieren, desean o necesitan muchas cosas y distintas pero se comprometen con muy pocas, porque el compromiso requiere una decisión de dedicar nuestro tiempo, energía y esfuerzo a lograr algo y ninguno de ellos es ilimitado. Cuando alguien se compromete elige invertir su tiempo y esfuerzo en un objetivo, renunciando a dedicar tiempo y esfuerzo a otras cosas. Nuestra función no es motivar, es ayudar a nuestros mentees a autorregularse motivacionalmente para lograr sus metas, a fortalecer su voluntad y su compromiso con ellas. 

-Que las mejores herramientas en el mentoring no son el CANVA, los objetivos SMART, los test u otras recetas prefabricadas en serie. Las mejores herramientas son el mentor, la relación y la conversación. Aparquemos esa obsesión por conocer herramientas, utilizar la última más innovadora, ocupar las sesiones con ellas; recordemos que una herramienta es un medio no un fin, un medio para facilitar el pensamiento del mentee, no para facilitar la labor del mentor. Los mentores no somos mecánicos, somos artesanos. No seguimos un manual de instrucciones que nos dice que botón apretar en cada momento, preguntamos, escuchamos, observamos y nos dejamos guiar por la persona a la que acompañamos.

El “hacer” para pasar de ser un mentor natural a ser un mentor intencional y efectivo. 

Si de verdad quieres ser un mentor que invierte en el desarrollo de otras personas para que logren sus metas y sean felices, a quien primero tienes que mentorizar es a ti mismo. Las primeras acciones de un mentor deben estar encaminadas a conocerse, a ser consciente de cuáles son nuestras tendencias naturales en las relaciones con las personas, a la hora de dirigir, liderar, trabajar en equipo, ser padres o madres y cómo de alineadas están con lo que significa ser mentor.

-¿Sueles microsupervisar a tus colaboradores o a tus hijos? Porque también lo voy a hacer con el mentee.

-¿Tiendes a acaparar las conversaciones? ¿Hablas más que escuchas? ¿Interrumpes? porque también lo vas a hacer en la sesiones de mentoring 

Una vez que conozcas tus tendencias trabaja sobre ellas para cambiar aquellas que no estén alineadas con el comportamiento  de un mentor excelente. 

La efectividad en el mentoring depende de pasar de ser un mentor natural a uno intencional, lo que implica ser un “aprendedor eficaz” de forma permanente. Aprender de cada proceso, de cada sesión y de cada relación con los diferentes mentees con los que trabajamos para ir interiorizando y desempeñando los comportamientos óptimos como mentor. Casi todos ellos están relacionados con habilidades de la inteligencia relacional para crear relaciones con engagement y la inteligencia conversacional para ser un alquimista conversacional: 

1.- Escuchar y observar con empatía

2.- Preguntar para facilitar el pensamiento y la toma decisiones

3.-Estimular la creatividad y ampliar las perspectivas para ampliar opciones

4.- Aportar conocimientos, recursos, experiencia de forma neutral e inteligente

5.- Retar para impulsar la acción y la experimentación.

6.- Visibilizar el talento del mentee y conectarlo con aliados estratégicos.

7.- Ser modelo de comportamientos para inspirarlos a ser cada día mejores y contar con referencias de cómo hacer las cosas para lograr metas.

Todas ellas son las que entrenamos y desarrollamos en nuestra Certificación Internacional en Mentoring, basada en nuestra metodología Integral Generative Mentoring, que te convertirán en un mentor excelente.

En este video, grabado con ocasión de la clausura del Programa «Barakaldo Mentoring Klub» promovido por Inguralde  y desarrollado por la Escuela de Mentoring a lo largo del 2022, te compartimos la experiencia de una de las parejas de mentores/mentees.

Nuestro mentor profesional acreditado, Aitor Gazteluiturri, entrevistó durante la Jornada de Clausura del programa, celebrada el 18 de Octubre del 2022 en Barakaldo, a Carlos García Cuevas, Responsable del Programa SOCEM-HUB de impulso al emprendimiento y empleo en el sector de la Silver Economy del Grupo SSI y Norberto Muñoz Castellanos, Director de Anzoategui Fisioterapia. Ambos han participado como mentor y mentee, respectivamente, en el programa “Barakaldo Mentoring Klub” y nos compartieron su experiencia en el programa, sus principales aprendizajes y el resultado del proceso de mentoring.

En esta entrevista podrás conocer el proceso de aprendizaje como mentor de Carlos García, a través de la formación recibida de la Escuela de Mentoring, los principales desafíos que tuvo que enfrentar Norberto para lograr su objetivo, cómo le ayudo su mentor, cuáles fueron las claves del éxito del proceso y el impacto que ha tenido en Norberto y su empresa.

Nuevos testimonios sobre los beneficios del mentoring para fortalecer los ecosistemas empresariales de un territorio, que se unen a todos los recogidos en «Las Voces del Mentoring», un espacio donde damos voz a los protagonistas de los programas de mentoring que hemos venido desarrollando a lo largo de más de 20 años de experiencia.

Te invitamos a escuchar el vídeo completo con la entrevista en el siguiente enlace.

 

Desde la Escuela de Mentoring queremos a agradecer a Carlos García Cuevas y Norberto Muñoz Castellanos, que nos hayan brindado su experiencia y que la compartan con todas las personas que están interesadas en conocer el mentoring como metodología de desarrollo empresarial y profesional. Ha sido todo un lujo contar con ellos como mentor y mentee en este programa de mentoring dirigido a impulsar el crecimiento de las pymes de Barakaldo.

Juntos hacemos crecer el talento, esta es la misión de las voces del mentoring, poner en valor la labor de los mentores y mentoras como motor del desarrollo de personas, organizaciones y territorios, a través de las experiencias en primera persona.

El pasado sábado 26 de Noviembre, nuestra Directora Maria Luisa de Miguel fue entrevistada en el programa de TVE «Audiencia Abierta» con motivo de su participación en el Programa de Mentoring Grupal Competencial de la Fundación Princesa de Girona. Durante la misma compartió las actividades que se habían llevado a cabo a lo largo del programa y los contenidos del taller presencial desarrollado en Madrid.

La entrevista se llevo a cabo en la sede de la Fundación Botín en Madrid, que es el lugar que acogió la realización del 3º Taller de Mentoring Grupal Competencial dirigido por nuestra Directora, que fue el cierre del programa iniciado a primeros de Noviembre con varias sesiones de mentoring grupal dirigidas a trabajar la competencia de «autogestión». En este último taller participaron los 21 jóvenes del programa «Generación Talento» de la Fundación Princesa de Girona y tres de los mentores de la Fundación para compartir experiencias sobre como mejorar la competencia de «autogestión: resiliencia y aprendizaje continuo».

 

 

 

 

 

 

En esta ocasión nos acompañaron los mentores Antonio Manzanera, Gerente de Selección y Desarrollo de Talento en Enagas; Helena Valderas, Global Head of Diversity and Inclusion; y Nieves Largo Olmedo, Directora de Agencias Externas del BBVA. Los tres respondieron a las preguntas de los jóvenes acerca de sus experiencias en relación al autoconocimiento, la resiliencia, el propósito, los objetivos, el aprendizaje, la toma de decisiones y el desarrollo de una carrera profesional.

En el programa «Audiencia Abierta» también fueron entrevistados varios jóvenes participantes en el programa de mentoring grupal, que compartieron como lo estaban viviendo y cómo les estaba ayudando para estar mejor preparados para desarrollar una carrera profesional en la empresa.  También otro de los formadores participantes en la jornada, Rodrigo Sampedro, quien compartió con los jóvenes la importancia del mindfulness para trabajar la autogestión.

Puedes acceder al video completo con las noticias relativas a las actividades del Program Generación Talento pinchado sobre este enlace o la fotografía. 

 

Ultimamente muchas personas acuden a mi como mentora para encontrar su pasión, su vocación, el trabajo que les emocione, les entusiasme, les apasione. No sé si es por tanto mensaje «descubre tu pasión» ,» haz lo que amas y no trabajarás ningún día de tu vida»…. , por la crisis de la mediana edad, o por que este mundo va tan de prisa que es fácil desorientarse.

La cuestión es que a veces esa búsqueda puede resultar bastante frustrante y no siempre podemos dedicarnos a lo que nos apasiona, por mucho que algunos te aseguren que son su «curso de milagros» lo vas a lograr. Quizás sea más fácil  desarrollar tu pasión en ámbitos diferentes del trabajo y tener un trabajo que te permita disfrutar de tu pasión. No sólo hay un camino en la vida, suele haber varias alternativas para lograr lo que se quiere y, a veces, el truco está en saber combinarlas, alinearlas o hacerlas confluir para llevar la vida que quieres o que te permite ser feliz, que al final es lo que cuenta.

Yo creo que lo más importante realmente es vivir una vida alineada con tus valores. Y dentro de esa vida, sin lugar a dudas el trabajo ocupa un lugar importante, con lo que quizás la pregunta sea más bien ¿en qué medida mi trabajo está alineado con mis valores? porque si no es así y, año tras año, continuas en él, sufrirás un desgaste tan grande, una pérdida de energía tan constante y un vacío de sentido tan fuerte, que al final estarás totalmente desmotivado e insatisfecho, sin fuerzas, sin ganas, exhausto emocional y mentalmente y sin capacidad de disfrute.

Suele ser en esos momentos de ya no poder más, de ir al trabajo como si fueras a hacer «trabajos forzosos», en los que ya nada te emociona, te sorprende o te interesa en los que, de repente, surge la necesidad de encontrar la pasión, cuando lo que de verdad debes buscar o reconectar con los valores que te hacen ser la persona que quieres. Esos que has ido olvidando, relegando, cediendo, bordeando, día tras día sin darte cuenta, y que te han llevado a desistir de existir, a desistir de ser en plenitud.

Si estás pasando un momento así en tu vida, te voy a recomendar, justo creo todo lo contrario a lo que se suele leer en el universo internauta: olvídate de la palabra cambio y, mucho más aún, de los cambios rápidos, bruscos, disruptivos o grandilocuentes, porque lo que necesitas no es un cambio, no es encontrar otra cosa, otro trabajo u otra vida, para huir de la que tienes y cambiarla por otra. Lo que necesitas es realizar una auditoria y actualización de tus valores, solo desde aquí lograras una transformación verdaderamente significativa que te aporte bienestar y satisfacción duradera y plena.

Vivir una vida plena es vivir una vida en consonancia con tus valores, pues son la fuente de nuestra voluntad motivada, y, por tanto, de nuestra energía, nuestra fe, nuestra confianza y nuestro entusiasmo. La clave es conocer cuales son en cada momento y alinearlos con nuestros objetivos personales, profesionales o sociales. Así como examinar si nuestro entorno y los sistemas en los que vivimos (familia, amistades, empresa, etc.) son coherentes, o no, con ellos y nos permiten vivirlos.

valores

Si este post ha despertado tu curiosidad, te ha inquietado, te ha hecho pensar, replantearte cosas, te ha estremecido, enmudecido, o te ha hecho escapar alguna lágrima, en definitiva, si ha tocado algo en ti, quizás te interesa responder a estos 7 bloques de preguntas, que te ayudaran a saber si tu trabajo, tu vida o tus relaciones te están permitiendo vivir según tus valores:

1.- ¿Estoy siendo la persona que realmente soy o verdaderamente quiero ser? ¿Lo que hago en mi vida, mi trabajo, mi entorno me permite aportar mi potencial, mi talento, mis fortalezas? ¿Me he convertido en alguien que no me gusta, no reconozco?

2.- ¿Siento que he logrado o estoy logrando lo que realmente quiero en la vida? ¿Tiene sentido para mí lo que hago, la vida que llevo? ¿Qué estoy aportando a mi entorno?

3.- ¿Mis relaciones personales, familiares me están permitiendo vivir según mis valores? ¿Tengo el tipo de relaciones que realmente encajan conmigo, me hacen crecer y florecer? ¿Están limitando mi crecimiento, mis aspiraciones o mis sueños? ¿Están llevándome a ser una persona que no soy o con la que no estoy gusto?

4.- ¿En mi día a día mis decisiones me hacen sentir satisfecho y pleno? ¿El trabajo que desarrollo me genera conflictos con frecuencia o fluyo en él? ¿Siento resistencias, desajustes, sin sentidos en mi trabajo?

5.- ¿Qué hay en mi trabajo o en mi vida que me da energía o me emociona? ¿Cuándo lo experimento? ¿Qué experimento cuales son mis emociones?

6.- ¿Que he aprendido en este año en mi trabajo o en mi vida? ¿Qué aprendizajes me permite mi trabajo o la vida que llevo? ¿Qué experiencias de aprendizaje he tenido y cómo han impactado en mi vida en estos años?

7.- ¿Qué momentos de diversión y disfrute he experimentado en el último mes en mi trabajo, mi vida, mi entorno?

Si las respuestas han movido algo más en ti, quizás sea el momento de replantearte cosas y empezar a trabajar en tus valores, en como incorporarlos a tu vida, a tu día a día, o cómo diseñarla para vivirla conforme a ellos. A veces no se trata de cambiar de vida, sino de cambiar la forma en que la vivimos. 

El valor de vivir en tus valores en un camino de transformación hacia la plenitud. ¿Quieres sentirlo? ¿Quieres vivirlo? En la Escuela de Mentoring podemos acompañarte para lograrlo.

Esta entrevista a Inaki Gabilondo, publicada en el Diario La Nueva España el 13 de Noviembre, es, en sí misma, todo un oráculo de sabiduría y aprendizaje y, además, una masterclass de mentoring.

He extraído de la misma algunas respuestas, que Iñaki Gabilondo comparte con su entrevistador, que considero tienen mucho que ven con lo que es la práctica del mentoring y lo que deben, y no deben, hacer los mentores y mentoras si realmente quiere potenciar el aprendizaje y el desarrollo de sus mentees.

1.- «Nadie consigue hacerse entender si previamente no ha entendido», lo que revela la importancia de la reflexión para tener claridad y orden mental y luego poder transmitir lo que realmente queremos y hacer más fácil el camino para entendernos y lograrlo.

Realmente el mentoring es una conversación reflexiva ,que guía el mentor para facilitar el pensamiento de su mentee. Una conversación que pretende ser un modelo de la conversación interna que nos ayuda a entendernos mejor, entender mejor a los demás, las situaciones, las experiencias y el mundo en general. Todo ello con el único fin de tomar mejores decisiones para lograr nuestras metas y realizarnos personal y profesionalmente.

2.-«Los historiadores tienen la ventaja de que observan la coyuntura con perspectiva, mientras los periodistas estamos inmersos en la coyuntura. Los historiadores tienen distancia y perspectiva y eso les da una gran dimensión a sus análisis.»

Esta respuesta revela la importancia de tomar distancia de nuestra propia experiencia y perspectiva, algo que nos cuesta mucho, por eso el mentoring funciona tan bien para facilitar los procesos de aprendizaje, cambio y desarrollo: porque en frente tenemos a otra persona que nos ayuda a tomar esa distancia, que nos hace de caja de resonancia, que nos ayuda a ver las cosas desde diferentes puntos de vista, a través de preguntas que nos hace reflexionar, de historias que nos ayudan a ver otras opciones. Todo ello contribuye a que profundicemos en el análisis de nuestras experiencias y podamos ver en ellas más matices, más sutilezas, más detalles, para convertirlas en una fuente de aprendizaje.

Cuando estamos inmersos en el día a día es difícil levantar la vista y tomar perspectiva. Para tomar buenas decisiones es importante estar en la plaza pero también en el balcón, salirnos de la vorágine del hacer y el bullicio de la plazo y subir al balcón a reflexionar, a ver las cosas desde otra ángulo, con más perspectiva y visión. Cada sesión de mentoring debe ser una oportunidad para que el mentee suba al balcón de su vida y la contemple desde allí, para luego bajar a la plaza y actuar con más consciencia y reflexividad.

3.- «La gente no habla si no se siente escuchada. Ese periodista que lanza una pregunta, tú empiezas a responder y él enseguida se pone a ver su guion para ver cuál es la siguiente pregunta que tiene que hacer… es alguien que no escucha.»

En la metodología Integral Generative Mentoring hablamos de las preguntas al hilo, al hilo de las respuestas del mentee, que le van ayudando a degranar su pensamiento, a contemplarlo con más amplitud y profundidad, a clarificarlo. Por eso no hay guiones de preguntas, el mentoring es una conversación abierta a la experiencia, a lo que el mentee trae y dice en el aquí y ahora. Las sesiones de mentoring no se planifican, se acude a ellas con apertura, acogiendo lo que el mentee dice, escuchándolo con interés y profundidad para poder hacer preguntas de calidad que mejora su pensamiento, aprendizaje y toma de decisiones.

Para hacer preguntas al hilo es necesario escuchar con calidad y no estar pensando en la pregunta magistral que voy a hacer. Si hacemos preguntas desconectadas de las respuestas del mentee, este, en su inconsciente, detecta que no está siendo escuchado y no siente el deseo de seguir compartiendo. Cuándo esto ocurre no solo se interrumpe el flujo de una conversación, sino también el flujo del pensamiento.

4.- Cuando teníamos las respuestas, nos cambiaron las preguntas.

Es importante acudir y estar en la sesión de mentoring sin prejuicios, sin etiquetas, sin creer que sabemos lo que va a pasar, o cómo va a venir el mentee o lo que nos va a preguntar, de lo contrario perdemos la oportunidad de dejarnos sorprender, de dejarnos guiar por él, de que sea el quien realmente decida de qué hablar, que se muestre, que nos vaya revelando distintas partes de sí. Si no estamos dispuestos a cambiar las preguntas, a hacer preguntas al hilo, estaremos limitando el desarrollo de nuestros mentees.

Además, esto es lo que nos permite realizar preguntas provocadoras y generativas, que son aquellas para las que el mentee no tiene respuesta inmediata, porque no la sabe, la tiene que buscar, que crear, y al hacerlo está aprendiendo, actualizando su inteligencia, renovando su conocimiento sobre sí mismo y sobre el mundo.

5- «Todos los que he entrevistado sabían más que yo. Si tú has escrito un libro y vamos a hablar sobre él, es que sabes más que yo, ¿no? Bueno, pues mi obligación es leerme el libro, todo el libro, y luego hacerte preguntas. Eso se llama respeto.»

Un mentor tiene que estar convencido de que la persona que tiene enfrente es la mayor experta en sí misma. Que realmente sabe lo que quiere, sabe cómo conseguirlo, solo necesita que le hagan las preguntas adecuadas para que esa sabiduría salga a la luz y pueda usarla para tomar las decisiones adecuadas.

Nuestra obligación es escuchar, con suma atención e interés, el libro que todo ser humano tiene dentro, para hacer surgir de él su hilo argumental, su propósito, los personajes principales, los retos y los obstáculos, trabajando con todo ello para que la persona narre su mejor novela.

El mayor error que podemos cometer es creer que sabemos más que nuestro mentee, que sabemos lo que quiere, necesita o le conviene. Por eso el mentor que habla más que escucha y pregunta es un mentor que no respeta la sabiduría de su mentee.

Es el cliente quién sabe qué es lo que le afecta, hacia dónde dirigirse, cuáles son sus problemas fundamentales y cuáles sus experiencias olvidadas. A menos que yo necesite demostrar mi inteligencia y mis conocimientos, lo mejor es confiar en la dirección que el cliente mismo imprime al proceso.” Carl Rogers

6.- ¿Qué significa para usted que un presidente no esté dispuesto a responder preguntas? A sus preguntas, en este caso. «A mí me parece fatal. Pero eso no tiene que ver conmigo, tiene que ver con nuestros oyentes. O sea: Aznar no me despreció a mí. Aznar despreció a nuestros oyentes.»

Un mentor debe saber poner las cosas en contexto, ir más allá de lo aparente y sobre todo no tomarse las cosas a título personal. Sostener con humildad y empatía muchas respuestas de su mentee, que no espera, no le agradan, le incomodan o le hacen sentir mal. Hace poco menos de un mes, en una de las conferencias que impartí sobre mentoring, una de las asistentes me pregunto ¿ y que haces si tu mentee el primer día te dice que no cree que pueda aprender nada de ti? Le contesté «sostener la respuesta», acogerla y preguntarte ¿qué puede haber llevado a esta persona a creer que no puede aprender nada de mí? ¿realmente está hablando de mí o está hablando del aprendizaje en general o de malas experiencias anteriores con procesos similares de aprendizaje?

Estar centrado en tu rol, en la función que ejerces, en el «para que» de la misma, tener presente ¿a quién sirves? ayuda mucho a despersonalizar, contextualizar y ver las cosas desde otro ángulo, aquel que permite ser más empático y asertivo.

7.- ¿Cree que la opinión ha contaminado al periodismo? «Tal vez la sobredosis de opinión. Porque para un medio hacer opinión es más barato que hacer información. Tal vez por eso hoy el universo de los opinadores se ha extendido.»

Hace ya algún tiempo publique dos artículos sobre la equivocada idea de considerar el mentoring una mera transmisión de experiencia y de conocimientos. En uno, hablaba de la necesidad de hacer más preguntas y dar menos consejos y, en otro, de que una visión del mentoring y el aprendizaje basada en la transmisión de conocimientos es anacrónica y limitante.

Realmente opinar, decirle a otra persona lo que tiene que hacer, indicarle cómo lo harías tú, o cómo lo hiciste, es más fácil que escuchar con atención y profundidad para realizar las preguntas que le ayudan a obtener sus propias respuestas. Por eso, los mentores opinadores, expertos y consejeros proliferan por todas partes; por eso muchos buscan cursos rápidos, fáciles y sencillos en los que, con pocas horas y poco esfuerzo, obtener un diploma que los certifica como mentores; por eso pocos están dispuestos a pasar por un proceso de transformación en el que dejar de deslumbrar para aprender a alumbrar.

Sin embargo darle a otro las respuestas, por muy buenas que sean y muy basadas en la experiencia que estén, no amplia su inteligencia, la deja como está; no fomenta la autonomía sino la dependencia; no contribuye a regenerar el conocimiento, sino que lo mantiene donde esta.

Un mentor debe ser curioso, estar abierto a la experiencia de aprender en todo lugar, en todo momento y de toda persona. Para aprender hay que preguntar y reflexionar, conectar lo nuevo con lo antiguo, lo mío con lo tuyo. Hoy a mi Iñaki Gabilondo me ha dado todo una lección de mentoring a través del oficio del periodismo y su visión del mismo.

 

Autora: Mª Luisa de Miguel
Directora Escuela de Mentoring